La cosa sí funciona

Un miércoles más, y ya van 4, he vuelto a escaparme al cine para hacer uso del "Día del Espectador" (aunque para los estudiantes el día del espectador lo es siempre).

Le ha tocado el turno a la nueva película de Woody Allen: "Si la cosa funciona (Whatever works)".

Tras su oscura "Match Point" y la penelopiana "Vicky Cristina Barcelona", Woody vuelve a rodar en EEUU una comedia al más puro estilo Allen, una cinta en la que el protagonista, Larry David, encarna al pesimista por excelencia. Pesimista hasta que se encuentra, por gracia del azar, con Melodie, una sureña medio gusana que le roba el corazón (literalmente). Poco después de casarse aparece la madre de la chica, una loca de la vida, republicana hasta la médula y que no soporta a su yerno. Esta visita no sólo afecta a su hija (ya que se encarga de que conozca a un chico de su edad y que termine dejando a Boris) sino que su vida da un giro radical: tras ser abandonada por su marido, encuentra el amor en brazos de 2 hombres, y se vuelve artista bohemia. Pero no termina ahí la cosa: el padre también aparece por la vida de su hija, y por supuesto, su vida también cambia: se da cuenta de que es gay, y encuentra al amor de su vida.

Toda una galería de personajes con los que te ríes y de los que te ríes (la forma de hablar de los sureños, o esa forma que tiene de tratar a sus alumnos el personaje de Larry David), y que hacen que los 90 minutos de duración se queden en nada. ¿La sorpresa? Evan Rachel Wood y Patricia Clarkson, aunque a ambas ya las tenía yo fichadas de sus trabajos anteriores.


Y no lo olvidéis: "Si la cosa funciona..."

Puntuación: 7/10.