lunes, 21 de marzo de 2016

Los cinco de Anna Mae


'How to Get Away With Murder' fue uno de los mejores dramas del año pasado y éste, aunque ha perdido el factor sorpresa, ha sabido mantenerse como un producto sólido. Tan bueno ha sido el resultado (a pesar de la considerable pérdida de audiencia) que la ABC la ha renovado ya por una tercera temporada (por lo que los americanos tendrán, un año más, la noche Shonda).

"Todo empezó con lo que hicisteis vosotros cuatro"
El primer año de la serie se centró en el asesinato de Lila Stangard (asunto que ha seguido coleando esta temporada, llegando incluso a tener relevancia en la season finale) y el segundo, aunque comenzó con el asesinato del matrimonio Hapstall, ha tenido que lidiar con una trama secundaria que, parece ser, seguirá acaparando protagonismo el año que viene. De hecho, el asesinato principal fue resuelto antes de que la serie se despidiese en Navidad, razón por la cual la audiencia no esperábamos el giro final y por eso, en mi caso, he recibido esta despedida con los brazos abiertos. Por eso y por la clase de baile que nos ha dado Viola Davis.

El gran pero que le he visto a esta temporada ha sido el personaje de Wes, que al disfrutar de trama propia con relevancia (tanto al principio como al final de temporada) ha estado separado del grupo (le hemos visto socializar muy pocas veces, siendo Laurel su única aliada: "Pero tú has estado cuidando de mí cuando no tenías que hacerlo"). Ha sido Asher quien ha ocupado su sitio, al que terminaron haciendo partícipe (un saludo a Emily Sinclair) de las locas aventuras de los cincos de Annalise Keating. Al igual que el año pasado, la primera parte de la temporada giró en torno a un flashback que marcó la trama Hapstall y que dejaba muy malparada a Annalise (que se marcó un homenaje a la TVMovie 'Lila & Eve' cuando sacó de fiesta a sus chicos).


La que ha espabilado este año ha sido Bonnie, que no ha dudado ni un momento en enfrentarse a Annalise ("Todo lo bueno que has tenido en esta vida es por mi causa") siempre que ha tenido ocasión ("Querrás decir a pesar de ti. Quiero que te mueras"). De hecho, Laurel jugó durante un par de capítulos a ser la nueva Bonnie de Annalise entre polvo y polvo con Frank (aunque para polvos, los conjuntados entre Michaela y Caleb, Annalise y Nate, y Connor y Oliver, estos últimos en el Aula de Derecho Penal, detalle que me fascinó). 

Phillip Jessup fue, para nosotros, siempre el culpable de la muerte de los Hapstall, pero no ha sido hasta el final cuando hemos descubierto que Annalise descubrió la verdad cuando Phillip le atacó en el piso de Wes. Verdad que se ha callado hasta ahora, cuando Caleb, el verdadero asesino, ha empezado a declarar contra su antigua abogada. Si Catherine sabía que fue Caleb el que los mató, ¿a santo de qué esa conversación entre hermanos cuando va a visitarle a la cárcel y en la que inculpan a Phillip? Laurel descubrió la verdad con respecto a la muerte de Lila y se la escupió a la cara a Annalise, que no tardó en pedir explicaciones a Boonie para, inmediatamente después, tomar una decisión: "Se tiene que ir". Así pues, Frank ha desaparecido del mapa.

"Somos todos malas personas. Es lo único que tenemos en común"
¿Es él responsable de la muerte del padre de Wes? ¿O ha sido Eve, sabiendo que Mahoney destrozó la vida de su amada? ¿Es o no es fascinantemente cruel y retorcido que Wes haya visto morir a sus padres con una diferencia de 10 años? ¿Qué ocurrirá cuando Connor descubra lo que ha hecho Oliver (que el año que viene será personaje regular) con su correo de admisión? ¿Cuánto tardará Annalise en darle trabajo a Oliver? ¿Hay algo de verdad entre Michaela y Asher? ¿Se quedará por siempre la madre de Annalise? Tocará esperar hasta el próximo septiembre para conocer las respuestas.

viernes, 18 de marzo de 2016

LAs gemelAs golpeAn dos veces


'Pretty Little Liars' está a una temporada de decirnos adiós definitivamente. ¡Y eso hay que celebrarlo! Su séptima tanda de episodios servirá para despedirnos de las zorrupias, a las que estoy seguro terminaremos echando de menos, pues lo que ellas nos han dado durante todo este tiempo no nos lo da ninguna otra serie. Pero ya habrá tiempo de llorar y comentar su final.

De momento lo que hoy toca es repasar los acontecimientos acaecidos desde que en agosto conocimos "el juego de la Sweet TrAnsvestite" y dimos un salto en el tiempo de cinco años para descubrir que, aunque -A había sido desenmascarada y detenida, el drama zorrupier seguía existiendo. Por eso aviso: si no llevas la serie al día, y todavía no has visto quién se va a Londres y quién a California, es mejor que no sigas leyendo.


El salto temporal (que se nota porque ahora, cuando las chicas se reúnen, beben alcohol y no zumos y por el nuevo sistema de mensajes que reciben de -A) no ha podido sentar mejor a nuestras queridas zorrupias: Ali, en su versión más gordi y viejuna, sigue en Rosewood, donde ejerce de profesora a la vez que se hace cada vez más íntima de Elliot (Huw Collins), el doctor que trata a su hermana Charlotte. Spencer está en el croma de Washington, Aria trabaja en una editorial, Emily es camarera y Hanna trabaja en el mundo de la moda. La mejor razón para reunirlas es que regresen a su ciudad para hablar frente al tribunal sobre la liberación de -A (Charlotte). 

Después de comprobar que Rosewood está repleta de cutre copias de ellas mismas, se reúnen por primera vez para hacerse una buena sesión de fotos Instagram y ponerse al día de sus vidas (la futura boda de Hanna, la muerte del padre de Emily, lo desgraciada que es Emily, el nuevo Radley propiedad de Ashley, la desaparición de la novia random [no es otra que Aurora de Martell de 'The Originals'] de Ezra, la carrera hacia el Senado de Veronica Hastings, las nuevas situaciones sentimentales de Spencer, Caleb y Toby, el viaje a Madrid de Spencer y Toby dónde ella llamó "salvajes" a los borrachos y él se enamoró de 'El perro' de Goya, el nuevo Lucas que no importa a nadie o los nuevos y maravillosos novios de Aria y Hanna).

"Tías, ¡qué pedo!"
Todo esto queda en un segundo plano cuando, después de testificar a favor de su liberación (excepto Aria) y conseguirla, Charlotte aparece muerta a los pies de la torre de la iglesia. ¡Qué simbolismo! ¡Si es que no hay nada mejor que regresar al hogar! A su funeral acude todo el mundo, incluidas Mona (que trabaja en el mismo mundo que Spencer) y Sarah Harvey, con la que tan buenas migas hizo Charlotte y a la que seguro le comió el papo. "¿Quién mató a Charlotte DiLaurentis?" se convierte en el nuevo "¿Quién mató a Alison DiLaurentis?" con la diferencia de que en el caso de Charlotte la muerte sí es real. Así es cómo las zorrupias vuelven a jugar a lo mismo de siempre, convirtiéndose en detectives que buscan respuestas. Y como ahora son más mayores y maduras, las pruebas a las que se enfrentan son más crueles. O sino que le pregunten a Emily por sus óvulos y a Aria por su visita al Templo del Fuego. 

Pero como no todo van a ser dramas, Byron y Ella Montgomery comunican a su hija que se van a volver a casar y que va a ser ella la que presida la ceremonia (que nadie pregunte por Mike). Y como aquí, si matamos dos pájaros de un tiro, somos más felices, Ali y Elliot (que dejan de ser amigos para ser novios) deciden dar el paso y le piden lo mismo a Aria: que sea ella la que les case. ¡En Rosewood cada día es una oferta! La que no está para celebraciones es Hanna, que pierde su trabajo, mientras que Aria recibe una especie de ascenso al escribir a cuatro manos la nueva novela de Ezra. En la familia Hastings vuela la sombra del cáncer en plena campaña, pero los dramas lo son menos cuando Melissa regresa a casa para odiar un poquito más a su hermana pequeña, hacer que todos sospechen de ella y aparecer en un flashback muy borracha. ¡Esto es vida! Pero la vida es más vida si cabe cuando volvemos a ver a la detective Tanner (con su peluca canosa para demostrar que el tiempo no pasa en balde). 

'Pretty Little Funerals'
¿Qué sorpresas nos ha deparado la season finale? La primera, y como no podía ser de otro modo, es que el plan de descubrir la identidad de la nueva -A ha sido un fracaso absoluto. Y eso que utilizan vallas electrificadas como si estuviesen en 'Jurassic Park'. Así que el sacrificio de Hanna (¡no puede quedarse sin montar su nuevo negocio junto a Lucas!) sirve única y exclusivamente para que nos vendan la moto de que la han asesinado (y de que está a punto de caer desde la torre de la iglesia, que por algo las tradiciones son tradiciones). No pienso tomármelo en serio porque sería de tremendo mal gusto matar a la mejor zorrupia de la serie. ¿ACASO NADIE DESEA QUE TORTUREN Y ASESINEN A EMILY? Otra de las sorpresas ha sido el nuevo look de Toby, al que los guionistas le han puesto gafas para disimular esa cara de Jar Jar Binks que ha tenido siempre. La novela escrita por Ezra y Aria ha gustado tanto a la editora (¡qué poco le dura al señor Fitz ese "Nunca la volveré a ver"!) que ya piensan en serie de televisión y precuela. Ah, sí, por supuesto hay beso entre la antigua pareja. Vamos, lo que todos sabíamos que iba a suceder (exactamente igual que con Caleb y Hanna después de la confesión de la rubia). Y Veronica es elegida senadora (¡nadie lo esperaba!).

Pero el twist definitivo de este final de temporada ha sido la reaparición de Andrea Parker, que había dado vida a Jessica DiLaurentis, la fallecida madre de Ali. Y es que, por si Alison hubiese sufrido poco, a los guionistas les ha apetecido que empezase a ver muertos. Aunque con trampa, pues en realidad ni está viendo a su madre ni está viendo a Wilden (otro muerto del pasado). Todo forma parte de una conspiración que sale bien: Ali decide ingresar voluntariamente en psiquiatría convencida de que necesita ayuda. Hija, Emily, ya podrías haber puesto un poco más de tu parte. ¿Y quiénes han urdido semejante plan? Por un lado Elliot (¿es él quien ha estado luciendo todas las máscaras y pelucas durante este tramo de la temporada?) y por otro Mary Drake. ¿Quién es Mary Drake? La verdadera madre de Charles (Charlotte), a la que tuvo mientras estuvo ingresada en Radley, y hermana gemela de Jessica (que adoptó a Charlotte); por lo tanto tía de Ali, lo que convierte a Charlotte y Ali en primas y no en hermanas. Elliot, un traidor en toda regla y el único hombre al que Charlotte quiso en vida, ahora pasa a controlar el 51% de Carissimi (gracias al ingreso de Ali), esa organización en la que trabaja Jason y de la que, supongo, conoceremos más la próxima temporada. "Por fin hemos recuperado lo que debía ser mío".

"Casi destrozo el matrimonio de los Scavo y ahora voy a sembrar el terror en Rosewood"
¿Y qué pasa con Sarah? Pues que si bien empiezan presentándonosla como oscura, turbia y siniestra, terminamos descartándola como sospechosa y convirtiéndola en simple detective que quiere descubrir (desde sus aposentos en Radley) quién asesino a su querida Charlotte. Cuestión que sigue en el aire (es imposible que la hayan matado su madre y su novio) y de la que esperamos encontrar respuesta en la temporada final de la serie. ¿Es su asesino el mismo que se ha llevado a Hanna? Si la que se llevó a Hanna fue Mary Drake (tal y como parece en el vídeo de seguridad), ¿son la misma persona su captor y el asesino de Charlotte? ¿O Mary Drake estaba ahí por casualidad? ¿Quién es A.D.? ¿Alison DiLaurentis? ¿Es todo un complot de los DiLaurentis-Drake?

¿Participarán las madres en la cabecera de la serie en su temporada final? ¿Les preguntará alguien por el tiempo que pasaron encerradas en el sótano? ¿A quién seducirá Emily en la última temporada? ¿O están Ali y ella destinadas a quererse? ¿Habrá intercambio de parejas entre Spencer, Toby, Caleb y Hanna (si sigue viva, claro)? ¿Se demostrará que Aria es mala o nos dejarán con las ganas? Todo esto y mucho más, este verano, en la séptima y última temporada de 'Pretty Little Liars'.

jueves, 17 de marzo de 2016

Trapos sucios


'American Crime' fue uno de los nuevos dramas que la ABC estrenó en 2015 y que, a pesar de contar con unas audiencias más bien discretas, sus buenas críticas y los premios recibidos (un Emmy para Regina King y nominaciones en los Globos de Oro, los Critic's Choice, los Satellite y los propios Emmy) animaron a la cadena a renovarla por una segunda temporada contando con, prácticamente, el mismo reparto pero en otros papeles. La fórmula se ha repetido con éxito y nos hemos encontrado ante el mismo drama pero ambientado en un "crimen americano" diferente: la violación.

"Dije la verdad. Desde el principio dije la verdad"
'American Crime' no es una serie que se quede a medias o que se corte a la hora de contar la historia (la censura de los tacos me parece absurda). Es un drama con todas las letras que agarra al espectador durante 40 minutos y no le deja respirar, dejándole a su fin con una sensación de agotamiento y desgarro sentimental brutal. Y, por supuesto, con la necesidad de ver lo que está por venir. La temporada ha sido del tal realismo que se emitió un "capítulo-documental" después de la bomba que fue el séptimo.

La segunda temporada comienza con Taylor Blaine (Connor Jessup), que asegura ser víctima de una violación a manos de Eric Tanner (Joey Pollari), un compañero de colegio, durante la fiesta del equipo de baloncesto. La lucha que emprenderá Anne (Lili Taylor) por que se haga justicia para su hijo terminará salpicando a la comunidad escolar, liderada por Leslie Graham (Felicity Huffman), que empezará defendiendo la institución que representa pero que terminará luchando por sí misma. Los padres (Timothy HuttonRegina KingHope Davies, Brent Anderson, Emily Bergl) del resto de alumnos también intercederán  para evitar que sus hijos se vean envueltos en el drama.

"No pasó porque los chicos no son violados"
De toda la trama queda más descolgado Chris Dixon (Elvis Nolasco), director de la escuela a la que Taylor quiere regresar después del incidente sufrido. Allí estudia su novia Evy (Angelique Rivera) y viven su propio drama racial (es como una trama paralela a la historia principal pero que carece de interés). La situación en el colegio privado dirigido por Graham repercutirá en la vida de Dixon, lo que no quita para que haya sido lo más flojo de esta temporada. Otra de las caras conocidas en la primera temporada y que también ha regresado este año ha sido la de Richard Cabral, que ha dado vida a Sebastian de la Torre, un hacker que ayuda a Anne en su búsqueda por conseguir justicia y que termina escaldado. 

La historia se ha ido complicando conforme iban saliendo a la luz secretos y trapos sucios de los personajes implicados en la trama ("¿Fuiste allí para tener sexo con él?" "Yo no...no fui allí para ser agredido", "Así que no lo violé. Hice lo que quería") a la vez que se iba dando pie a una guerra sucia en la que todo ha valido (filtración de informes médicos, SMS, correos electrónicos...). El resultado (acentuado por esa muerte de un alumno simultánea al asalto injustificado sufrido por Eric en el coche del desconocido) ha terminado explotando a todos en la cara.


Todos los personajes que ha participado de forma activa en la segunda temporada de 'American Crime' han visto su vida explotar por los aires. Nunca sabremos qué decisión toman los dos protagonistas del incidente pero algo me dice que ambas estarán relacionadas.

jueves, 3 de marzo de 2016

Los mundos de Shannara


'The Shannara Chronicles' es, oficialmente, mi novedad seriéfila del año preferida. ¡Y menuda sorpresa! Una serie basada en las novelas del mismo nombre escritas por Terry Brooks y dirigida, inicialmente, a un público adolescente. ¡Y a mí! Y es que 'Shannara' ha resultado ser un drama de aventuras, magia y seres sobrenaturales mucho más interesante y atractivo de lo que parecía. ¡Y lo que consigue enganchar! Aquí podéis leer mi repaso a sus primero capítulos.

"Ella cuida de todos nosotros"

'The Shannara Chronicles' se beneficia de un nutrido grupo de personajes en el que todos cumplen con una misión, enfrentándose juntos a giros inesperados y a más personajes secundarios que van apareciendo en los capítulos (10) de la primera temporada a los que los protagonistas han de hacer frente como si de las 12 pruebas de Hércules se tratase (fantásticas esas guardianas del Fuego de la Sangre). Todo siguiendo la estela marcada por 'El señor de los anillos', saga con la que 'Shannara' tiene más de un punto en común.

A partir de aquí spoilers de la primera temporada de 'The Shannara Chronicles'.


Amberle, Wil y Eretria han sido el trío protagonista de la aventura que les ha llevado a recorrer medio mundo para poner a salvo las Cuatro Tierras. Para conseguirlo han contado con la ayuda del rey Eventine (hasta su muerte), de su sucesor Arion (hasta su muerte) y del actual rey Ander (antes Uncle Ander y al que ha dado vida ese ser sobrenatural llamado Aaron Jakubenko). Pero no han sido los únicos, pues Allanon, el druida, ha sido pieza clave para que los jóvenes consiguiesen su objetivo. Y, en menor medida, la comandante Tilton, que lucha al lado de los elfos hasta su muerte a manos de su ex (Arion), que regresa de los muertos poseído por el Dagda Mor, el villano a batir. La aparición de Bandon nos hizo pensar que los personajes recibían a un cómplice, pero ha terminado rebelándose como el malo en la sombra al que harán frente en la segunda temporada (MTV no ha renovado la serie, pero la season finale terminó con un "to be continued").

A lo largo de la temporada hemos ido conociendo datos sobre los personajes. Así, por ejemplo, sabemos que Eretria (¡qué bien se ha adaptado Ivana Baquero a EEUU!) no era hija de Cephalo (que termina muriendo siendo un héroe, "Eres lo mejor que hice"), sino que él la compró y la tenía bajo su poder. Algo especial hay en ella ("Es una niña del Armagedón"), pues gracias a su sangre ("Tu cuerpo es el recipiente, tu sangre es la llave") Amberle descubre cuál es su verdadera misión en esta aventura. Ambas, junto con Wil, han dado cuerpo al trío amoroso que toda serie para adolescentes debe tener. Pero en absoluto ha resultado pesado. Al revés, la dinámica entre ellos ha funcionado muy bien, y se han dedicado más a sobrevivir que a coquetear (lo que no quita para que se hayan desfogado a gusto las veces que han querido).


Mientras los tres avanzaban en busca del Fuego de Sangre, los adultos debían hacer frente al ejército de demonios liderado por Dagda Moro. Las muertes, primero de su padre y después de su hermano, terminan convirtiendo a (sexy) Uncle Ander en (sexy) King Ander, no sin los recelos del Consejo élfico. Los mayores tampoco se libran de la cuota de romanticismo, pues al igaul que los jóvenes, hay un trío formado por los dos hermanos y Tilton, lo que sí afecta a sus relaciones, aunque se unen por el bien de la Ellcrys. (Sexy) Under es el encargado de que los gnomos se unan a los elfos, haciendo frente común a los demonios, que estarán dispuestos a arrasar con todo lo que se les ponga por delante una vez abandonen su prisión tras la caída de la última hoja de la Ellcrys.

Bandon parecía que iba a ayudar a los buenos, pero en el momento en que Allanon es consciente de que el Dagda Mor accede a sus pensamientos a través del aspirante a druida, comienza a desconfiar de él. Y con razón. ¿O es Allanon responsable de esta situación? Sea como fuere, Bandon consigue escapar y, tras la muerte del Dagda Mor, él se convierte en su heredero. ¿Qué es en realidad? De la que sí podemos decir con claridad qué es, es Amberle: la misión a la que Allanon le envió iba con truco, pues la conclusión es que ella misma es la semilla que dará nueva vida a la Ellcrys. Es decir, es ella la que se convierte en la nueva Ellcrys, lo que le obliga a decir adiós a su posible vida junto a Wil ("Tienes que elegir sacrificarte"), que visto el percal, decide regresar a por Eretria, que se quedó atrás para que la sobrina de (sexy) King Under cumpliese su objetivo.


¿Descubriremos el verdadero origen de Eretria? ¿Qué supone que sea una niña del Armagedón? ¿Quién es el líder de los trolls, al que reconoce cuando se quita la máscara? ¿Tiene algún tipo de plan oculto Allanon? ¿Qué otros males ha despertado Dagda Mor? ¿Podrá salir Amberle de la Ellcrys? Tocará esperar, primero, a que MTV se pronuncie y, después, al estreno de sus segunda temporada.

miércoles, 2 de marzo de 2016

El centro comercial y la telenovela

La NBC cerró las primeras temporadas de 'Superstore' y 'Telenovela', sus novedades en comedia estrenadas en enero, la semana pasada, y lo hizo con la renovación asegurada para la primera mientras que la segunda necesita mucha suerte para continuar en antena. Ninguna ha destacado por sus audiencias, aunque es cierto que la comedia protagonizada (y producida) por America Ferrera ha corrido mucho mejor suerte que, la también protagonizada y producida, por Eva Longoria.

Ninguna de las dos ha sido ha sido especialmente buena, aunque sí es cierto que ambas han sabido desarrollar cierto encanto que ha impedido que fuese capaz de abandonarlas. 'Superstore' porque se ha nutrido de un grupo de personajes que han ido ganando en adorabilidad y 'Telenovela' porque ha pasado de ser una serie que se disfrutaba precisamente por lo mala que era a ser una comedia un poquito menos mala y más divertida de lo que parecía.


'Superstore' se ha beneficiado de sus personajes, liderados por Amy (America Ferrera) y Jonah (¡qué bien se acopla Ben Feldman a sus compañeras de reparto!), aunque sin dejar de prestar atención a Dina (Lauren Ash), Garrett (Colton Dunn), Glenn (Mark McKinney) o Mateo (Nico Santos), que han sido otros de los personajes que han estado presentes en todos los episodios (11) de la primera temporada. La dinámica de grupo entre los empleados de Cloud 9 ha funcionado muy bien y ha ido a mejor, conforme íbamos conociendo más de ellos (como es el caso de Amy, de la que hemos ido conociendo detalles sobre su vida a pinceladas). Ha estado especialmente graciosa cuando Dina se enfrentó a la ladrona de tiendas (Natasha Leggero) con la participación de Amy ("'Crazy Eyes' es un personaje en cada prisión de EEUU, ladrona puta") o cuando la propia Dina se enzarzó con una mendiga porque estaba usando un carro de Cloud 9.

'Superstore' regresará el año que viene con una segunda temporada y con una novedad: "Cloud 9 estará bien sin vosotros, pero tengo una tienda que dirigir". ¿Se mantendrá la situación o conseguirán cambiarla?


'Telenovela' ha sido el spin-off no oficial de Gabrielle Solis tras el final de 'Mujeres Desesperadas' y es que Ana Sofía Calderón (una estrella de las telenovelas que no sabe hablar español) y Gabi podrían pasar por la misma persona. Comenzó siendo una comedia de vergüenza ajena, mala como ella sola y precisamente disfrutable por ello. Pero ha sabido ser menos mala que al principio (sin dejar de serlo, claro) para terminar mostrando un encanto y una gracia de las que al principio carecía. Eva Longoria está perfecta en su papel absurdo y ridículo, y se rodea de unos secundarios que viven prácticamente por y para ella (Mimi y Gael). El reencuentro entre Longoria (que, una vez más, demuestra lo bien que se le da la comedia, y como prueba de ello está el capítulo de la educación sexual) y Ricardo Chavira (su marido en la serie de la ABC) fue protagonista de uno de los mejores capítulos de su primera temporada (11 episodios). 'Telenovela' ha jugado muy bien con el género al que parodiaba, introduciendo elementos típicos del mismo (esa gemela villana).

¿Vivirá 'Telenovela' una segunda temporada? ¿Sabremos qué decisión toma Ana tras esa reaparición (esperada) final?