jueves, 21 de junio de 2018

La (falsa) Plaga


Parecía que no iba a llegar nunca, pero por fin esta semana terminó la tercera temporada de 'Supergirl' (disponible en HBO España). Y es que el parón de más de dos meses (entre febrero y abril) ha hecho que la serie de la CW retrasase su final hasta la penúltima semana de junio. La temporada, en términos de audiencia, no ha funcionado mal (con una media de 0.51 en demos y algo más de 1'8 millones de espectadores, por debajo del 0.73 y los 2'36 millones de su segundo año); en cuanto a la trama, para mí ha estado acertada, el problema ha sido su parón, que ha hecho que diese la sensación de llevar viendo lo mismo desde hace demasiado tiempo (la tercera ha sido la temporada más larga de 'Supergirl', con 23 episodios, 1 más que la segunda y 3 más que la primera). El año que viene, por cierto, 'Supergirl' sufrirá un nuevo cambio y pasará a emitirse la noche de los domingos.

Se agradecen todos los sucesos acontecidos en la season finale, dejando claro que el pasado ya no importa y que lo verdaderamente relevante es el futuro. Y por eso hemos visto pinceladas de lo que está por venir, después de despedir a un par de personajes. De aquí en adelante spoilers de la tercera temporada de 'Supergirl'.


La trama Raign me ha parecido muy interesante (qué poco han aprovechado la presencia conjunta de las tres Matamundos), pero de lo larga que ha sido, ha terminado perdiendo fuelle (y siendo un poquito coñazo). Parecía que su desenlace no iba a llegar nunca, y no ha sido hasta el final de temporada cuando, con viaje en el tiempo incluido, hemos visto a Samantha Arias venciendo sobre Raign (después de ser testigos de cómo Supergirl hacía caso a su madre y aceptaba matar para eliminar el mal). Raign, impulsada por las tres brujas, ha estado a punto de destrozar la Tierra para, borrón y cuenta nueva mediante, crear un nuevo Krypton. La ayuda de Imra (la escena de la congelación de la ola ha sido de las más impresionante de la serie) ha sido esencial para conseguirlo.

Con las villanas caídas, llega el turno de repasar los cambios que se han producido en este capítulo final y que afectarán a la serie en su futuro. Por un lado hemos asistido al cambio de puesto que se ha producido entre Winn y Brainy. Y es que Winn (Jeremy Jordan no será regular la próxima temporada) se incorpora a la Legión y viaja al futuro para ayudar a evitar que "el familiar maligno" de Brainy acabe con todas las inteligencias artificiales. Y con Winn se va Mon-El ("No puedo abandonar el mundo que juré proteger cuando más me necesitaba"), que se despide de manera definitiva de Supergirl, de Kara y de la audiencia, ya que Chris Wood no seguirá en la serie. Si lamenté su (falsa) despedida la temporada pasada, ésta (mucho más fría que la primera) no me apena demasiado, pues me parece que Mon-El ya no aportaba lo que sí aportó en el pasado. Y además me sabe mal que el personaje regresase, dando esperanzas a que él y Kara retomasen su relación, para llegados a este punto, despedirle para siempre.


J'onn ha visto morir a su padre, que ha decidido sacrificarse para ayudar a poner fin a los planes de Raign. Esta trama familia me ha aburrido soberanamente, pero lo cierto es que su despedida me ha parecido muy bonita y emotiva ("Promueve la paz. Y sé feliz, hijo mío"). J'onn ya no será el Director del DOE, papel que asumirá Alex, y aunque no va a abandonar a su familia, va a vivir una vida más relajada. Y Alex (me encantó el guió a 'Anatomia de Grey' "Quería ser investigadora, por eso trabajé durante un tiempo en Seattle"), que estaba dispuesta a renunciar para conseguir la vida familiar que tanto ansiaba, ha visto recompensado su duro trabajo y en su nuevo papel vivirá una vida menos peligrosa que le ayudará a conciliar trabajo y vida familiar. Supergirl (qué ausente ha estado Kara esta segunda mitad de temporada) ha decidido quedarse en la Tierra ("Mi misión es protegerla"), renunciado a su vida junto a su madre. James ha desvelado que él es Guardian ("No todos saben que Guardian es negro. El racismo es la forma más antigua de bullying") y Lena  ha entregado a Alura la materia que les ha ayudado a vencer a Raign asegurando que no queda nada en la Tierra. ¡Mentira! Lena e Eve están experimentando con ella, no sabemos muy bien por ni para qué.

Así pues, la cuarta temporada de 'Supergirl' contará con la baja de Mon-El, la presencia episódica de Winn y el fichaje de Brainy, que será el nuevo Winn. Tendremos a Lena siendo más Lena que nunca y sacando adelante sus propios planes. ¿Cuándo le contará Kara que es Supergirl? ¿Será mayor el odio que siente Lena hacia Supergirl? Pero lo más importante, y la que parece que será la trama central de la temporada, es la presencia de una doble de Supergirl que ha aparecido en Siberia en el momento en que Supergirl viajó en el tiempo para evitar las muertes de gran parte de su equipo y así vencer a Raign. ¿Tendremos una Supergirl soviética?

martes, 19 de junio de 2018

Traición


'Billions' es de esas series que requieren un esfuerzo extra por parte del espectador y que no tarda en recompensarle por ello. Y es que, si bien somos testigos de conversaciones eternas e imposibles de entender, ya sabemos que es marca de la casa encontrarnos escenas-explicación poco después. Y no hablo de que nos traten como a idiotas, no; hablo de que a través de actos se ponga en imágenes lo que no hemos entendido con palabras. Nos presentan primero la teoría para luego enseñarnos la práctica. Y os aseguro que no hay mayor placer que ése.

Showtime (en España se puede ver en Movistar +) acaba de renovarla por una cuarta temporada que promete ser épica por lo sucedido con sus dos protagonistas. Y es que, después de lo que vivieron en sus dos primeras temporadas y de lo que les ha sucedido a ambos en la tercera, es inevitable que la cuarta se centre en eso cuyo germen hemos visto en la season finale.

Ahora toca repasar las grandes tramas de la tercera temporada de 'Billions' por lo que el texto estará repleto de spoilers. Si no estás al día, te recomiendo que dejes de leer.


La temporada comenzó con las consecuencias de la trama de los zumos, que terminó obligando a Bobby a dejar de ser, temporalmente, la cabeza de Axe Capital, papel que recayó en manos de Taylor. Paralelamente a la construcción de este caso, Chuck Sr. seguía moviendo los hilos para que la carrera política de su hijo diese el pistoletazo de salida y Bryan se ponía como objetivo frenar a su jefe sacando a la luz sus trapos sucios ("Me temo que Chuck ha empezado a abusar de su poder. ¿No te gustaría joderle?"). Precisamente los avances de Bryan fueron los que provocaron la inesperada alianza entre Chuck y Bobby, promovida en gran parte gracias a Wendy. "Si uno va a la cárcel, vamos todos. Nuestro único objetivo ahora es sobrevivir".

La jugada les salió redonda, pues ambos consiguieron evitar la ley, y aunque su mayor preocupación era cómo se iba a sentir Wendy después de decidir echar la culpa a un tercero, la mujer de Chuck no tardó en demostrar su frialdad, fortaleza y capacidad de manipulación (que le pregunten a Mafee). Los que salieron perdiendo fueron el propio Bryan y Dake; el primero despedido por Chuck ("Aprendiste todo lo que te enseñé, excepto lo que más importa: no ganaste"), y el segundo por Jeffcoat (Clancy Brown), la mano invisible detrás de todos los movimientos contra Rhoades, que decidió convertir al General en su nuevo rival a batir. Y es que Chuck, a pesar de dar un golpe sobre la mesa para ser él el único responsable en su camino hacia la mansión del Gobernador ("Yo tomaré las decisiones, tú y tu gente trabajaréis para mí"), escuchó a su mujer ("Veo a alguien que sabe que una de esas cosas le hace sentir vivo y la otra se sentirá como una obligación") y pagó una vieja deuda ("Necesito que sigas siendo fiscal") renunciando así a su carrera política.


De este modo Chuck ha ido removiendo cielo y tierra para hacer caer a Jeffcoat, una persona dispuesta a utilizar la justicia a su antojo, por lo que podemos afirmar que, por primera vez en tres temporadas, Rhoades estaba haciendo lo justo y correcto. Sin olvidar lo que hizo por su amigo Ira (aunque su padre jugó un importante papel: "No le lleves gonorrea a tu esposo, es descortés"). Y aunque parecía que todo iba sobre ruedas, no contaba con la reaparición de Bryan y Dake, empeñados en hacer caer a Rhoades, y que tras descubrir sus planes (Sacker se fue de la lengua), vuelven a los pies de Jeffcoat para ponerle al día de la trampa en la que iba a caer. Conclusión: Chuck ha sido despedido y Bryan ocupa su puesto.

Por su parte, y después de haber recuperado el control de Axe Capital, Bobby ha conseguido llamar la atención de un poderoso (y peligroso) inversor ruso: Grigor Andolov (John Malkovich). "No puedes perder mi dinero. Si es así tenemos un problema. ¿Entendido?". Grigor ha llegado en el que parecía ser el mejor momento de Axe...de no ser por Taylor, que ha traicionado (por lo motivos adecuados) al que le convirtió en lo que hoy es ("Hice lo que debía hacer para sobrevivir y ganar") y ha montado su propia empresa de inversión, llevándose personal, Mafee, y capital, tanto de Bobby como de Oscar Langstraat, su fugaz novio. Grigor no se lo ha pensado dos veces y ha propuesto encargarse de Taylor ("Cuanto te joden, me joden a mí también"), propuesta que ha sido rechazada por Bobby ("Le destruiré de formas que deseará que hubiese pasado lo que tú me ofreciste").


Así pues, si Bobby y Chuck vivieron enfrentados hasta la mitad de la tercera temporada, momento en el que firmaron la paz, la cuarta la van a vivir trabajando juntos (ahora que no hay conflicto de intereses) con el único objetivo de vengarse de todos aquellos que les han traicionado/han sido más listos que ellos: Jeffcoat y Taylor. Y Wendy va a ser pieza clave, especialmente después de una temporada en la que se ha pasado oficialmente al lado oscuro ("Lo próxima vez que quieras emboscarme, amenazarme, humillarme o joderme, mejor que recuerdes con quién te metes"), en el que se ha dado cuenta de que está mucho más cómoda de lo que pensaba. 

Me gusta que 'Billions' recurra a personajes secundarios del pasado para utilizarlos en el presente. Especialmente me gusta Ira, que nos ha dejado dos grandes perlas esta temporada: "Me he dado cuenta de que necesitas esto; poner a la gente en situaciones imposibles para controlarlos a tu voluntad y torturarlos" y "Lo extraño de toda esta locura, lo que me enseñó, es que a veces lo peor que te pasa no es tan malo". Me encanta Wags (la trama de su parcela del cementerio fue genial) y echo de menos a Lara, olvidadísima desde la temporada pasada, pero que al menos, cuando aparece, lo hace para recordar lo mucho que se le echa en falta ("Los hombres de mi vida no necesitan tus malditos consejos"). ¿Habrá acercamiento entre ella y Bobby? ¿Sabremos algo más del padre de Bobby, considerado por su madre como "tu primer gran enemigo"?


'Billions' regresará el año que viene con el estreno de su cuarta temporada, y no me podéis negar que lo que está por venir no puede ser más apetecible.

miércoles, 13 de junio de 2018

Fuego soporífero


Lo tengo claro: cuando termine la emisión de la cuarta temporada de 'Fear the Walking Dead' (que acaba de despedirse antes del parón estival), la abandonaré. Perdí toda mi paciencia con su serie madre y desde luego no pienso invertir más tiempo con una serie cuyos capítulos veo haciendo más cosas a la vez. Y es que, seamos sinceros: 'FTWD' se ha vuelto soporífera. A diferencia de lo que me ocurre con 'The Walking Dead' (a cuyos personajes les deseo la peor de las muertes por el odio que siento hacia el 95% de ellos), con 'FTWD' lo que siento es auténtica indiferencia: no puede importarme lo más mínimo lo que les suceda. Es más, esta temporada se ha producido una muerte que no me da dado ninguna pena, y nos han dejado con la duda con respecto al destino de otro personaje (¿de verdad está muerto?).

Y es una pena, porque comenzó siendo un drama familiar en un ambiente hostil que nos presentó situaciones no vistas en 'TWD' pero no tardó mucho en repetir su patrón: llegar a un sitio "seguro" para destrozarlo y tener que volver a hacer las maletas. Todo ello a través de personajes que empezaron siendo interesantes pero que ahora me son irrelevante y no siento interés alguno hacia ninguno de ellos. Ni siquiera por los nuevos, que han convertido en simples secundarios a los personajes de siempre en esta primera mitad de temporada. Y que tengamos que tragar con Morgan (personaje más odioso de 'TWD') ha sido lo peor que podía pasarle a la serie.

A partir de aquí spoilers de los 8 primeros capítulos de la 4ª temporada de 'Fear the Walking Dead'. 


Aviso de los spoilers, pero lo cierto es que no ha pasado nada relevante en este comienzo de temporada. Sí, un personaje ha muerto, pero no le hemos dicho adiós porque ahora jugamos con las líneas temporales. Sí, otro personaje parece que también ha muerto (en el último capítulo), pero me parece a mí que le veremos vivo y coleando a su regreso. Por lo demás, no ha pasado NADA. Nada relevante. Comenzamos dando la bienvenida a Morgan, que echó a correr y salió de 'The Walking Dead' ("Acabarás con gente de un modo u otro") para entrar en 'Fear the Walking Dead'. Una vez instalado en su nuevo hogar, no tardó en hacer buenas migas con John (Garret Dillahunt), su versión blanca ("Yo tampoco mato. Al menos intento no hacerlo") y Althea (Maggie Grace), reportera dicharachera de 'Callejeros: ¡mi vecina es un zombie!".

A la vez hemos ido viendo (porque este año 'FTWD' ha descubierto las líneas temporales y los diferentes usos de la fotografía) qué fue de los protagonistas de la serie tras lo ocurrido al final de la temporada anterior. Todos están bien excepto Nick, que está traumatizado (¿cuándo no lo ha estado?). Se han instalada en un estadio de béisbol, su nuevo hogar (spoiler: no les dura ni una temporada) y han conocido a Los Buitres, la versión 'FTWD' de Los Salvadores, con Mel (Kevin Zegers) como marca blanca de Negan. Y como hemos jugado con las líneas temporales, no hemos descubierto hasta el final qué pasó en el estadio para que el camino de Alicia, Victor y Lucy se haya cruzado con el de Morgan, Althea y John. Y con el de June, antes Naomi (Jenna Elfman) y Charlie (Alexa Nisenson).


La conclusión ha sido que Los Buitres son muy malos y que los buenos son muy buenos ("Aquí todos respiramos. Significa que estamos en el mismo bando"). Y entre medias hemos visto morir a Nick a manos de Charlie (pequeña traidora), no sin antes tener que tragar con uno de los aburridos discursos de Morgan. Ha sido un auténtico coñazo comprobar que han necesitado 8 capítulos (y un fuego de campamento) para contarnos lo que pasó en el estadio: los Buitres (no olvidemos lo malos que son a pesar de las veces que le advirtieron a Madison que su plan era erróneo "Por mi experiencia, las cosas malas de verdad nunca las ves venir", "Madison, por favor, ¡esas malditas paredes no aguantarán!", "Deberíamos pensar en irnos") lo llenaron de zombies bañados en gasolina y Madison se vio obligada a comenzar un incendio para librarse de ellos. Con ella dentro. ¿Que Madison ha muerto? ¿Va a perder la serie a dos miembros de su reparto original en el mismo tramo de temporada?

Porque, siendo honestos, las vidas de los nuevos personajes no me importan un pimiento. John era un agente de policía que disparó a quien no debía y decidió que no volvería a usar un arma de fuego; June perdió a su hija; y de Althea lo único que sabemos es que quiere ganar el Pullitzer. ¿Que John y June fueron amantes? Qué interesante, sí. Casi tanto como esa historia de amor que no llega a desarrollarse entre Strand y Cole (Sebastian Sozzi). El hecho de haber tenido varias líneas temporales estos 8 capítulos no sólo ha sido una forma de estirar la trama, sino que ha quitado dramatismo a la muerte de Nick; si seguimos viendo al personaje, jamás sentiremos su pérdida.


'Fear the Walking Dead' regresará con la segunda mitad de su cuarta temporada el próximo 12 de agosto en EEUU. Podrá verse el capítulo de forma simultánea y en VOSE gracias a AMC España, que estrenará los nuevos capítulos (doblados) el lunes 26 (con la emisión de los dos primeros). No miento si digo que tengo ganas de dar carpetazo a los zombies.