Mi (otra) familia

La temporada de season finale ha comenzado, y una de las primeras series en despedirse ha sido "Cinco Hermanos". Es curioso; allá por Septiembre se dijo que la quinta sería la última temporada de los Walker, que sería más corta de lo habitual (por recortes de presupuesto) y que Calista Flockhart reduciría sus apariciones. Y ahora en Mayo, y con toda la temporada vista, sólo se ha cumplido lo tercero. La temporada ha terminado teniendo 22 capítulos y, de momento, la ABC no ha confirmado ni su renovación ni su cancelación. Sí hemos leído que posiblemente se renueve por una sexta y última (y esta vez sí) reducida temporada, con menos Calista (nada nuevo) y con alguna que otra ausencia de Sally Field (que estará rodando la nueva película de Spielberg "Lincoln"). Y a pesar de que el capítulo que ha puesto punto final a la quinta temporada podría pasar perfectamente por series finale, yo soy pro-sexta temporada de despedida de los Walker, con 6, 10 ó 13 episodios.

Me ha encantado la temporada en general, aunque sí es cierto que ha tenido un par de episodios "extraños". Ya podíamos imaginarnos que tras el dramático final de la temporada anterior nada iba a ser igual para la familia Walker. Y así ha sido, porque al principio de la temporada despedimos a Rebecca (Emily VanCamp) y más o menos, hacia la mitad, hicimos lo mismo con Holly (a pesar de que Patricia Wettig ha seguido apareciendo en los créditos). Sin olvidarnos de la baja de Rob Lowe. Pero a fin de cuentas no dejaban de ser personajes "secundarios" en relación con los Walker (aunque Holly siempre me encantó). En cambio, sí se han notado las ausencias de Calista Flockhart. Se supone que su baja se debía a que quería hacer cine, pero en su ficha en IMDB, recoge que su última película fue "Frágiles" en 2005. La principal razón de sus ausencias ha sido el dinero, todos lo tenemos claro. Eso sí, capítulo en el que aparecía y en el que compartía escena con Rachel Griffiths, capítulo que dejaba enormes momentazos.

Pero vayamos hermano por hermano. Kevin y Scotty comenzaron temporada tras "sufrir" dos abortos, lo que alejó sus posibilidades de ser padres. Kevin sufrió de lo lindo cuando descubrió que Scotty tuvo un pequeño affaire con uno de sus camareros, y Matthew Rhys (que por cierto, se estrenó como director esta temporada) nos regaló un capítulo digno de todos los premios habidos y por haber. Entonces Olivia se cruzó en su camino, y aunque al principio les costó, consiguieron adoptarla y formar por fin una familia. Pero hacia el final de temporada descubrieron que Michelle, la que iba a ser su vientre y que sufrió los abortos, tuvo a su hijo y se lo escondió. Tras otra mini crisis entre Kevin y Scotty, Michelle les entregó a Daniel, el bebé, y oficialmente son una familia feliz. El único pero que ha tenido su trama ha sido Olivia: la niña se hizo odiosa al principio, y aunque todavía me cuesta tragarla, la tengo bastante asumida.


Justin perdió a Rebecca y comenzó a trabajar como médico de ambulancia (tendrá su nombre técnico, pero en estos momentos no me sale). Ha estado bastante graciososo toda la temporada, y después de un romance con Annie (Odette Annable, sí, esposísima de Dave Annable) la enfermera, y su momento buen samaritano, ha terminado reencontrándose con Tyler (Marika Dominczyk, que en el pasado no se lo hizo pasar muy bien que digamos), con la que parece ser va a empezar una nueva relación (siempre y cuando ésta se divorcie).

Sarah y Luc comenzaron temporada como pareja y la han terminado como marido y mujer. No sin haberles costado un par de quebraderos de cabeza, con trabajos de modelo de ropa interior, madres que fueron actrices en el pasado, intentonas de pasar una noche romántica en un hotel e hijos en edad de tocar un poco la moral. Además, Sarah comenzó siendo una Walker de padre, para terminar siendo una Walker de corazón, de padre Brody. El trabajo de su madre en la radio le ha dado también problemas, sobretodo cuando ésta comenzó a salir con Karl, compañero suyo de radio. Y para más inri, el día de su boda, en la que finalmente es su padre quien la lleva al altar, conocer a su nueva hermana pequeña.

Kitty ha estado ausente toda la temporada. Se fue a Washington a tratarse ante una posible recaída, e hizo que su madre y hermana pensasen que se había echado un ligue. Ligue que llegó en forma de Seth (Ryan Devlin), y que les deja con la oportunidad de ser padres, aunque esto supondría que si Kitty recayese, no podría ser tratada. Geniales sus escenas con Sarah, ya bien sea a las puertas de una discoteca o en una cena para reconquistar a Seth.

Y dejo para el final a la matriarca, a la madre de todas las madres, Nora Walker. El amor y admiración que siento por Sally Field es por todos conocido. Me emociona siempre, me saca una sonrisa y me hace sentir como de la familia. Me declaro fan absoluto de sus caras y cuando lo pasa mal, me lo hace pasar peor. Comenzó trabajando en una floristería para terminar teniendo su propio programa de radio, donde conoció a Karl (John Terry). La felicidad había llamado a su puerta, y tras superar la visita del huracán Gabriela Laurent (Sonia Braga), parecía que todo iba a ser de colores. Lo suyo con Karl no cuajó, y fue entonces cuando apareció Brody (Beau Bridges). Presentado como un novio suyo del pasado, ha terminado siendo el padre de Sarah, y pareja actual (y definitiva) de mami Nora.

Por el camino, Saul ha encontrado el amor en Jonathan (Richard Chamberlain), con el que se casará. Tommy llegó con una nueva novia (Cara Buono), nos metió una trama que no me gustó, y que encima fue el origen de todo el tema Brody (que sí me ha gustado).


Lo dicho, una buena temporada, que tuvo un bajón un poco antes de la mitad de temporada, pero que nos ha regaldo muchos momentos "walker". Pero quiero más, y por eso estoy a favor de una sexta y última temporada. Una temporada para reír, llorar, emocionarme y disfrutar de mi familia televisiva favorita. Una temporada para ser un Walker más.