lunes, 2 de agosto de 2010

Walter & Jesse

La televisión por cable ha dejado claro que no hacen falta 22 episodios para contar una historia; con 13 basta. Y así lo ha dejado claro, una vez más, la AMC con una de sus series estrella, "Breaking Bad", esa joya que todo seriéfilo que se precie debería ver. La primera temporada me supo a poco, la segunda me tuvo con el corazón en un puño, y su hasta ahora tercera y última temporada me ha tenido en una tensión continua desde que vimos por primera vez a los hermanos Pinzones (los primos de Tuco). ¡Spoilers de la tercera temporada!


Y todo comenzó donde lo dejó el final de la segunda temporada, con la separación de Walt y Skyler y el descubrimiento de la otra profesión del profesor de instituto. Además teníamos a Jesse en el centro de desintoxicación, del que salió limpio y orgulloso. Como he dicho, los hermanos Pinzones entraron en escena pisando muy fuerte y dejándonos ver de lo que eran capaces. Y de hecho nos tuvieron en vilo estando Walt en la ducha y ellos fuera esperándole hacha en mano. Pero la mano de GusObama es alargada, y su poder no tiene límites.

El séptimo capítulo "One minute" marcó un antes y un después. Sus últimos minutos fueron de auténtico infarto, pero Hank Schraeder no es un personaje al que menospreciar, y así lo puso de manifiesto al hacer frente a nuestros amigos los Pinzones. Mientras el cuñadísimo hacía frente a los hermanos, Jesse pasaba una tarde de ensueño en el laboratorio y terminaba encontrando en sus compañeros de terapia a posibles vendedores de cristal. Hank continuaba con su recuperación, y Skyler le contaba su hermana una mentira inocente sobre la doble vida de su ex-marido. Y así llegamos al capítulo de la mosca, en el que Walt estuvo a punto de meter la pata de cara a Jesse, ya que le ví capaz de confesar lo qué realmente pasó con Jane. Fue un capítulo algo raruno. A mí no terminó de convencerme aunque sí me pareció interesante.


Los dos últimos capítulos han supuesto un giro a la historia. Jesse y Walt han pasado de ser indispensables para GusObama a ser un pequeño grano en el culo. Después del momento "Run!" estaba claro que las cosas no iban a ser iguales. En mi retorcida cabeza he llegado a pensar que no era Walt el que le tendía la "trampa" a Jesse cuando le dice a Mike que confesaría su paradero. Pero Walt es un señor de principios, incapaz de vender al que lleva siendo su compañero de aventuras por tres temporadas. Y ese ha sido el final, Jesse cara a cara con Gale, "su encargo".


Habrá que esperar hasta marzo para saber que les depara el destino a esta pareja tan peculiar, y qué hará GusObama con ellos. Nos vemos en "Los Pollos Hermanos".

2 comentarios:

Un telespectador más dijo...

Fue un peazo de temporada con mayúsculas, para mi la mejor serie de este año junto con Dexter y Sons of Anarchy, va a estar dificil que gane el Emmy, pero merecer lo merece muy mucho.

Esos últimos minutos del One minute son una puta maravilla. No tenemos escenas así todos los días...y menos mal, porque el corazón se resistíria jeje

Saludos!

Fon dijo...

Un telespectador: hombre, tuvo una grandísima temporada, pero Dexter me gustó más. Pero por intensidad, igual.