Final no tan desesperado

Uno de los finales de temporada que más ganas tenía de ver, junto al de Lost, era el de Mujeres Desesperadas. El misterio desarrollado a lo largo de sus 24 episodios prometía dar lugar a un final de dramáticas consecuencias. Y hasta aquí pueden leer los que siguen la serie pero aún no han visto el final. El resto, atrevidos y osados, meteos en terreno Spoileado...

De primeras diré que, sinceramente, me esperaba un final algo más impactante. Vale que eso de matar a niños en la televisión muy adecuado no es, pero podría Marc Cherry haber dado un paso más allá y habernos soprendido con otra cosilla, aunque imagino que otra baja entre las Desesperadas no iba a ser buena. Pero aún así, el final me ha encantado, porque nos ha dejado a todas y cada una de las desesperadas con un asuntillo entre manos.

Por un lado tenemos a la bellísima Gabi, que ha hecho que Eva Longoria Parker (nuestra Longo) tenga más que merecida este año un hueco entre las nominadas al Emmy. Después de haber pasado una temporada de cambios (recordemos su "fealdad", sus hijas, Carlos que recupera la vista...) ha vuelto a ser la Gabi de temporadas anteriores, aunque ahora deberá hacer frente a su sobrina por parte de Carlos: Ana, una adolescente que se gana el favor de los chicos/hombres de un modo más que dudoso. Vamos, que no es puta, pero casi....Su relación promete grandes momentos.

Lynette también ha tenido una temporada intensa (el asunto de su hijo y el incendio, las continuas crisis de Tom, la búsqueda de trabajo...) y por eso, ya no es que merezca la nominación al Emmy, es que ella se lo merece directamente. En la seguna parte de la Season Finale, Lynette ha vuelto a sentirse mal, haciendo que concertase una cita con su médico al pensar que el cáncer había vuelto. Pero, gracias a Dios no ha sido así, sino que vuelve a estar embarazada...y de gemelos. Así que Tom va a tener que decir adiós a sus días de universidad, y Lynette a su trabajo. Decir que por un momento llegué a pensar que que iba a abortar.

A la que las cosas se le han torcido, pero para bien, es a Bree. Su no divorcio de Orson le va a costar caro, porque tener que soportar a alguien que no quieres tiene tela, pero si además a ese alguien le sumas que es Orson y buf...Pero, ella, que no es tonta, se ha liado con su abogado, que a su vez es el ex-marido de Susan, y ella ni ha pensado en ello, toma moralidad de amistad. De todos modos, espero que esta aventura no le dure mucho.

La protagonista del misterio sin quererlo ni beberlo ha sido Susan, desesperada a la que mucha gente le tenía manía pero que ha recuperado el tono (a mí sigue pareciéndome tan genial como al principio). Al final, ni ella, ni Mike ni MJ han salido heridos del enfermizo plan de Dave, el cual sí ha salido mal parado, epues ha terminado en un Hospital para enfermos mentales. Supongo que no volveremos a saber de él, pero ha sido un bueno malo (por cierto, que gracias a una de sus alucinaciones pudimos recuperar por unos minutos a Edie).

Dejo para lo último a Katherine, la última incorporación. Me da a mí la sensación de que no tiene sitio en la serie (y mira que me gusta). Depués de no casarse con Mike (su escena sola en el aeropuerto me ha dado mucha pena) y de dejarnos con el interrogante de si es ella la nueva mujer de Mike, no sé yo que le queda por hacer.

¿Quién se esconde debajo del velo? ¿Susan? ¿Katherine? ¡¿OTRA?!

Lo dicho, que ha sido una temporada más que grande. La cuenta atrás para volver a tener a nuestras vecinas favoritas, ha comenzado.