Los fans de 'Nashville' estamos de enhorabuena: a pesar de que este año ha tenido una audiencia digna de cancelación (de comenzar en Septiembre con más de seis millones y medio de espectadores y un buen 2.1 en demos a despedirse con poco más de cinco millones y un flojo 1.3), la ABC ha sido buena y la ha renovado por una tercera temporada; así que en otoño tendremos mucha más Rayna y mucha más Juliette. Su segundo año en emisión ha sido algo inferior al primero, aunque la serie ha sabido mantener su esencia.
Spoilers de la segunda temporada de 'Nashville'.
Leave Juliette alone! |
La segunda temporada de 'Nashville' ha sido la de la muerte. Todo comenzó con Rayna luchando por su vida y convertida en una mártir por la que toda América rezó. Rayna salió adelante y Deacon rehizo su vida con su abogada. Luego le llegó la hora a Peggy, la querida de Teddy, que murió asesinada sin haber explotado su falso embarazo. Entonces le llegó el turno a Lamar, que entre asuntos turbios y dramas familiares cruzaba al otro lado. Todo después de enfrentar a sus hijas tras descubrir que Tandy iba a ser la testigo principal en el caso contra el ex alcalde de Nashville. Por el camino, Teddy se acostó con la novia de Deacon, que regresó a su espiral de auto-destrucción. Destrucción como la que la madre de Scarlett trajo a su vida, haciendo que se volviese loca de psiquiátrico (y se escondiese debajo de un piano) durante episodio y medio (lo bien que lo hubiésemos pasado con ella en la versión Nashville de la López Ibor). Eso sí, nos dejó un temazo para el recuerdo ("Black roses"). Por el camino Rayna se enamoró de Luke, su yo versión masculina y su hija Maddie, que ya conocía la identidad de su verdadero padre, lo hizo público. ¡Drama alert en la familia Conrad!
Pero no olvidemos que Rayna es una estrella del country y que tiene una carrera. Después de crear su propia discográfica y de fichar y desfichar cantantes, ella termina siendo la única estrella y el lanzamiento de su nuevo CD es el centro de su universo. Pero Jeff Fordham, su antiguo jefe no va a ponérselo fácil. Primero despide a Juliette por un vídeo montaje de fanáticos cristianos de los que nos dan la vida (maravillosa Juliette vestida de persona random para que no le reconozcan por la calle). Después le roba a Rayna a Will, presentado como el futuro del country. Jeff conoce el secreto de Will, razón por la cual le lía con Layla, la promesa del country que no duró nada. Su mejor idea es convertirlos en protagonistas de su propio reality, al más puro estilo 'Alaska y Mario'. Jeff publicará el primer disco de Will el mismo día que Rayna su nuevo disco, y así se desata la guerra. Mientras, Maddie y Deacon se acercaron como hija y padre y se dedicaron a componer canciones. Además Avery y Juliette se convirtieron en pareja, a la vez que Gunnar (que se ha hecho de oro) se liaba con la mejor amiga de su ex. ¡Todo queda en casa! Y, lo mejor, fue ese capítulo "God bless America" en el que las estrellas cantaron para sus tropas con la aparición estelar de Michelle Obama.
Lo que una pota une, que no lo separe el country |
Y así llegamos a la season finale. Juliette y Avery son felices. Se quieren, se aman, se desean. Hasta que Fordham llama por teléfono al músico. "¿Por qué no lo coges?" "No me voy a meter en la cama con Jeff Fordham". ¡GUIÑO, GUIÑO! Cómo son estos guionistas, de verdad. Rayna descubre los planes de Fordham para sabotear la salida de su CD, así que decide declararle la guerra improvisando un concierto en un estadio. Porque organizar un concierto de hoy para mañana se puede hacer en cuestión de minutos. Jeff (que está metido en todos los ajos) chantajea a Juliette con contarle a Avery su desliz si ella no firma con su discográfica. Asi que la rubia mueve cielo y tierra para ser despedida por Rayna, pero la Jaymes, que es muy lista, descubre que hay gato encerrado. Después de aparecer borracha en el evento de rehabilitación de Deacon, Rayna la visita en su casa y, después de escuchar toda la verdad, termina sujentando el pelo de su ex némesis mientras vomita. ¡Qué bonita es la amistad! Juntas derrotan a Jeff y llenan el mundo de amor.
Maddie está muy pesada con labrarse una carrera discográfica a la vez que no hace mas que repetir que cómo hubiese sido la vida de sus padres de seguir juntos. Por eso la pedida de mano de Luke les pilla a todos desprevenidos. Rayna es la reina, no lo dudéis: tiene pendientes de ella a su pareja actual, al padre de su hija mayor, y a su ex marido y padre de su hija menor. Los hombres de Rayna. Por supuesto la reina del country lo peta y consigue las ventas deseadas, dejando a Will tocado y hundido. Tal es su situación que decide salir del armario con Layla, sin saber que en realidad está haciéndolo también para las cámaras. Scarlett, que ha decidido volver a casa, se despide de Gunnar, que después de cantarle una balada de las que le ponen tonta, hace que se plantee su destino. Igual que Avery y Juliette, que probablemente volverán a estar juntos. Pero la sorpresa final nos la da Deacon, dejándole claro a Rayna que le quiere: "Ahora sé cómo amarte. Ese hombre que siempre quisiste que fuera...ahora lo soy. Y puedo ser un marido ahora. Y puedo ser un padre. Y puedo darte todo (...)" y, de regalo, le devuelve su anillo.
Dolor de Rayna |
'Nashville' lo tiene todo para tener una gran tercera temporada, que vistas las audiencias de su segundo año, probablemente será la última. Por eso debe despedirse por todo lo alto, siguiendo regalándonos temazos y situaciones wtf made in Nashville.
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